emoCreativos

¿Cómo orientar a los niños hacia un APRENDIZAJE CREATIVO Y FELIZ?


4 comentarios

Aprendizaje adaptado al cerebro

hemisferios creativosHasta hace veinte años, lo que sabíamos acerca del cerebro humano nos llegaba de un modo «indirecto»: con estudios experimentales en animales, o mediante el estudio de cerebros «dañados» que requerían una intervención quirúrgica. La actual revolución técnica ha permitido, entre otras cosas, crear la tecnología capaz de observar y analizar científicamente cómo funciona realmente el cerebro. Por tanto, la antigua idea de que el cerebro está diseñado exclusivamente por la genética ha quedado obsoleta, dejando paso al descubrimiento, tan positivo para el aprendizaje, de que los cerebros «se construyen» mediante nuestras experiencias, que moldean literalmente el cerebro (como hemos explicado en una entrada anterior dedicada al concepto de plasticidad).

«El mensaje emergente es claro: el cerebro, con su compleja arquitectura e ilimitado potencial es una entidad enormemente plástica y constantemente cambiante, poderosamente modelado por nuestras experiencias de la infancia y a través de toda la vida» Diamond y Hopson (1998)

Pero mientras la neurociencia avanza a un ritmo frenético, la educación todavía parece no sentirse interpelada al cambio: ¿Cómo no caer en la cuenta de que la explosión de conocimiento sobre el cerebro afecta, y cómo, al diseño del aprendizaje y a la tarea educativa?

El concepto educación «cerebro-compatible», que por primera vez acuñó Leslie Hart en su libro Human Brain and Human Learning se refiere a esto: una educación diseñada para ajustar los escenarios y la instrucción a la naturaleza del cerebro. Para los docentes comprender la biología del aprendizaje es una tarea necesaria, e implica la revisión de nuestras prácticas tradicionales en el aula para poder así evaluar la compatibilidad de nuestro modo de enseñar-aprender con el funcionamiento real del cerebro del niño. El objetivo debiera ser, por tanto, ofrecer al alumno ese aprendizaje real, efectivo, significativo, personalizado y además adaptado a su ritmo y a su estilo de aprendizaje.

sentir-documentar-divertirse...

Siguiendo el artículo que Jane McGeehan, miembro del Center for effective Learning Susan Kovalic, publicó en la revista Green Teacher, nº 64, podemos destacar tres ideas esenciales del campo de la investigación cerebral, que nos ofrecen una oportunidad para un mejor el aprendizaje cerebro-compatible del alumno:

1.   La emoción es el guardián del aprendizaje

Cerebro (Actividad cerebral): El estado emocional del alumno condiciona su aprendizaje. La activación de la amígdala (centinela cerebral de la emoción) ante situaciones de estrés o miedo en el alumno tiene el extraordinario poder de «apagar» su pensamiento racional, dando orden al cuerpo, en milésimas de segundo, para preparase para la defensa.

Aprendizaje (Aplicación educativa): Crear un clima emocional seguro es la primera misión del docente, por ello, establecer lazos positivos entre maestro y alumno es la antesala del buen aprendizaje. Los alumnos están en disposición de aprender sólo si sienten un ambiente de preocupación mutua en el grupo. Por eso es tan importante promover la confianza, el respeto y el cuidado de unos a otros mediante actividades colaborativas y cooperativas.

2.   La inteligencia se desarrolla en función de la experiencia

Cerebro (Actividad cerebral): Las variedad y novedad de las experiencias cambian físicamente el cerebro. Se ha podido comprobar científicamente como la riqueza en las experiencias vividas, desarrollan nuevas ramas neuronales: dendritas, e incrementan las conexiones entre ellas: sinapsis.

Aprendizaje (Aplicación educativa): En el aula se trata de proporcionar al alumno la mayor riqueza de medios educativos para el aprendizaje, pero es además fundamental que el alumno viva experiencias de primera mano fuera de la escuela: pisar los charcos, observar las hormigas, vivir de cerca un día en la vida de un anciano… Entender que la riqueza de experiencias es el sustrato para el aprendizaje, es una razón suficiente y valiosa para crear un Aula viva.

3.   El cerebro almacena más eficientemente lo que es significativo para el alumno

Cerebro (Actividad cerebral): El proceso seguido ante un estímulo sensorial es el siguiente: primero se activan las neuronas y las sensaciones son transmitidas a través del tálamo y enviadas al neocórtex donde se reordenan. Casi simultáneamente la información se envía a la amígdala para su evaluación emocional y a la corteza frontal para la evaluación de su contenido. Pero en qué consiste esta evaluación: esencialmente el cerebro se pregunta: ¿esto tiene sentido?, ¿me preocupa?… Todo ello está intrínsecamente relacionado con la formación de la memoria, porque científicamente se tiene constancia que contextos emocionalmente importantes crean memorias poderosas, sin embargo la información que carece de sentido personal y no tiene gancho emocional no crea en el cerebro las redes neuronales necesarias para formar la memoria a largo plazo.

Aprendizaje (Aplicación educativa): La primera tarea, a nivel de aula, es el conocimiento del alumno: no podemos conocer aquello que es significativo para un alumno, aquello que le interesa, si no sabemos nada de él, para ello es clave establecer relaciones personales auténticas con los alumnos. Como segundo paso se trataría de conectar los objetivos de aprendizaje con las áreas de intereses de los alumnos y con realidades que les son cercanas. Hay que crear vínculos entre el desarrollo de habilidades con el «funcionamiento» del mundo: promover una apertura real de la escuela a la Comunidad.

Anuncio publicitario


1 comentario

Los niños no son tontos: rompiendo las costuras de la razón

603107_409068142509695_1904607887_n

«Giocare con l’arte? Ma capiranno?… Così piccoli, capiranno cos’è l’Arte?… Capire cos’è l’Arte è una preoccupazione (inutile) dell’adulto… capire come si fa a farla è invece un interesse autentico del bambini» (Jugar con el Arte? pero lo entenderán?… Tan pequeños, entenderán lo que es el Arte?… Entender  qué es el Arte es una preocupación (inútil) del adulto, entender cómo se puede «hacer» (arte) es, sin embargo, un interés auténtico de los niños)

Alberto Munari

Es en el Arte y en los cuentos, pero también en cómo contamos la vida a los niños, cuando se transparentan nuestros pre-juicios hacia ellos: ¿Consideramos a  los niños personas capaces de entender el mundo? ¿Nos esforzamos tanto por preservarlos de lo que juzgamos como «triste» o «malo» que les construimos sucesivas esferas de cristal para protegerlos (o aislarlos)?

Los niños necesitan ser respetados y tienen el derecho a rodearse de ambientes ricos de experiencias.

El «enriquecimiento» significa dar nuevas oportunidades. Y esto no es compatible con una ciudad fragmentada donde el niño sólo se relaciona con otros niños y sus padres, pues los lugares de juego y ocio son suturas en el continuo urbano y las aceras ya no se pisotean, las tiendas no se curiosean y ya no se «cruza la calle solo»; no es compatible con una ciudad donde las personas mayores  «no existen» porque los barrios están estratificados por edad y condición social. Rodear a los niños de un ambiente rico no es respetar tanto «su espacio» que la mayoría del tiempo están solos abriendo nuevas ventanas virtuales para comunicarse; tampoco es uniformarles ofreciéndoles los mismos «planes familiares», las mismas canciones que les martillean en casa, en la escuela y en el teatro. Apuntemos hacia un horizonte alto que, sin embargo, tiene que ver más con una vuelta a «lo esencial», a las pequeñas cosas y a recuperar un ritmo más humano, el ritmo de los niños. 

El «ser respetado» se relaciona con el cómo nosotros les «enseñamos a mirar» el mundo. No nos olvidemos que los niños son personas cuyo nivel de comprensión es mucho mayor del que nosotros creemos. No podemos aislarles de lo que ocurre a su alrededor, pero lo tenemos que hacer de otro modo: podemos «ponernos en sus zapatos» para acercarnos a otro modo de pensar: un pensamiento en el que no se han apagado la curiosidad, la magia o el misterio.

Sobre los niños, sobre cómo son, otra vez Eduardo Galeano nos trae un poco de lucidez:

“Los niños se sienten respetados. Yo no escribo para débiles mentales y buena parte de la literatura que los adultos escriben para los niños está dirigida a niños de muy limitado alcance mental. Son libros que están o destinados a aterrorizar a los niños o son escritos como para tontos.

Esos mitos y cuentos tienen mucho que ver con la religión, con la magia, con un mundo que a veces es despreciado porque no es racional o porque no parece serlo; pero sí que lo es, sólo que lo es rompiendo las costuras de la razón.

Sí que ocurre en el proceso civilizador una suerte de mutilación progresiva de la capacidad de asombro, de magia, de locura. […] el pensamiento mágico puede llegar a ampliar el horizonte de la realidad, mostrándonos otras realidades que están atrás de la que uno ve.»

Eduardo Galeano

 


Deja un comentario

Confiando en las utopías

Llevamos unos días cogiendo impulso… una larga carrerilla para dar, otra vez, un gran salto y atravesar el espejo de este mágico nuevo año (con un 13 de la suerte). Y hoy estamos desgranando nuestros nuevos deseos y descubriendo otros nuevos destinos hacia los que viajar.

Frente a esta página del calendario, hoy todavía en blanco,  soñamos, deseamos y pedimos:

_Encontrar palabras para aprender, enseñar y comunicar lo que somos y lo que sentimos

sueños helena

«A la casa de los nombres acudían, queriendo llamarse, las personas y los bichos y las cosas.

Los nombres tintineaban, ofreciéndose: prometían buenos sones y ecos largos. La casa estaba siempre llena de personas y bichos y cosas probándose nombres. Helena soñó con la casa de los nombres y allí descubrió a la perrita Pepa Lumpen, que andaba en busca de un nombre más presentable».

Nombres, en Los sueños de Helena de Eduardo Galeano

_Que los sueños  formen parte de nuestra realidad… deseamos soñar despiertos y compartir la visión mágica del mundo que tienen los niños.

sueños

«Suele pensarse que el procedimiento mejor para obtener hombres perfectos consiste en adaptar al niño al ideal que tengamos del hombre maduro […] Eduquemos la infancia como tal, el hombre mejor no es nunca el que fue menos niño, sino el revés: el que al frisar los treinta años encuentra acumulado en su corazón el más espléndido tesoro de infancia […] Hay hombres que llevan en el ángulo de la pupila una inquietud latente, la cual hace pensar en un niño acurrucado y escondido, presto a dar un brinco genial sobre la vida, la carrera loca y alegre que proporciona el gran botín de la ciencia y del arte»

El Quijote en la escuela, ensayo de José Ortega y Gasset

_Recuperar la curiosidad y la capacidad para asombrarnos… y para ello no hay mejor lección que la que los niños nos ofrecen gratuitamente todos los días. 

_Visitar frecuentemente nuestra «zona de aprendizaje»… para observar, experimentar, comparar… para apasionarnos por aprender. Pero además queremos perder el miedo y atrevernos a viajar más allá, a la «zona mágica», donde todo puede suceder:


Deja un comentario

Design thinking: Thomas Heatherwick «Building the Seed Cathedral»

Para comprender de qué hablamos cuando nos referimos al proceso creador, qué queremos decir con Design Thinking

Escuchando a T.Heatherwick explicar algunos de sus proyectos, podemos intuir que se trata de «otro modo de pensar», conectando ideas aparentemente sin-relación, utilizando el pensamiento analógico, trabajando dentro de un proceso flexible y abierto pero adaptado a los objetivos del objeto que  queremos crear y al contexto particular en el que éste se debe insertar, al que pertenecerá y que deberá mejorar.