…porque una imagen nos transmite mucho, desde cosmograma.com nos llega esta estupenda propuesta…
Qué mejor que mirar_nos y reflexionar sobre lo que somos y lo que hacemos, sobre nuestras capacidades y talentos, sobre lo que nos hace felices… Parece fácil, pero no estamos acostumbrados a pensar, con cierta distancia crítica, sobre nosotros.
Desde nuestro compromiso educativo, nos preguntamos:
¿No es importante tener en cuenta estas claves para orientar a los niños en su aprendizaje?
¿No debemos, como primer paso, identificar lo que a los niños le gusta, lo que aman hacer, lo que «se les da bien», lo que les interesa, para así construir con ellos su «mapa del talento»?
¿Consideramos, además de nuestros intereses e inclinaciones, lo que podemos aportar al mundo? ¿Cuál es nuestra vocación y cuál es nuestra misión?
Como dice K. Robinson todo esto es El elemento, aquello que nos apasiona y que «se nos da bien», aquello que, mientras lo hacemos, nos hace perder las nociones de espacio y tiempo, aquello que «necesitamos hacer» porque nos sentimos felices (independientemente de si nos pagan o no). El elemento es el lugar secreto en que sabemos quiénes somos. Descubrirlo implica convertirnos en los protagonistas de nuestra vida.
Recuperar nuestro elemento y ayudar a los niños a descubrirlo es, desde luego, avanzar en el camino hacia un aprendizaje creativo y feliz