Buscar, descubrir y ayudar al otro a sacar lo mejor de sí mismo: sus virtudes y fortalezas, su talento…
de ti tu mejor tú.
Ese que no te viste y que yo veo,
nadador por tu fondo, presiosísimo.
Y cogerlo
y tenerlo yo en alto como tiene
el árbol la luz última
que le ha encontrado el sol.
Y entonces tú
en su busca vendrías, a lo alto.
Para llegar a él
subida sobre ti, como te quiero,
tocando ya tan sólo a tu pasado
con las puntas rosadas de tus pies,
en tensión todo el cuerpo, ya ascendiendo
de ti a ti misma […]
Pedro Salinas. La voz a ti debida