“Sólo si los niños pueden vivir hoy plenamente como tales, mañana serán personas adultas en la plenitud de su potencial.
El renacuajo no se hace mejor sapo si se lo fuerza a vivir fuera del agua prematuramente. Así también, el niño no desarrolla mejores cualidades humanas si se reprime sus impulsos naturales, si se le obliga a portarse como un pequeño adulto que debe pasar durante muchas horas inmóvil, callado, asimilando conocimientos en proporciones reguladas científicamente por medio de lecciones verbales, siguiendo ejercicios predeterminados, de acuerdo a un horario organizado por especialistas en pedagogía.”
de José Ortega y Gasset
10 de enero de 2013 en 8:59
Bonito texto y muy potente para debatir. ¿Cuál es la fuente bibliográfica del texto? Gracias
10 de enero de 2013 en 15:01
Hola Lucio, este texto tan interesante nos ha llegado a través de: https://educaciondemocratica.wordpress.com. Sentimos no haber conseguido, dentro de la extensísima bibliografía del gran Ortega y Gasset, situarlo exactamente. De todos modo, siguiendo esta concepción biológica de la educación, te recomendamos el ensayo «el Quijote en la escuela» (Biología y Pedagogía)”, que, si nos facilitas tu correo electrónico, te lo podemos enviar. Un saludo
10 de enero de 2013 en 20:13
Muchas gracias Isabel. Sí, me interesa mucho la relación entre biología y pedagogía. Aunque a estas alturas parece una ridiculez seguir afirmándolo, somos seres corpóreos y parece que la escuela no siempre atiende a este hecho (trata de ignorar el cuerpo, pero este se rebela de mil y unas formas; mientras los sistemas educativos intentan inventar formas para contenerlos o para estigmatizar a quien no es capaz de contenerse).
Mi correo es luciopalencia@yahoo.es. Estaré encantado de recibir ese ensayo. Muchas gracias.